Frío, frío

No nos dormimos, no. El cambio de horario no asustó a la afición y, aunque es verdad que no estuvimos todos los que somos, fuimos todos los que estábamos. Llegamos al pabellón y observamos que Ballesta se había recuperado, una alegría; Alo cojeaba, no podría jugar, primera decepción; aunque había nevado menos de lo inicialmente esperado, el frío en el CUM Carlos Sastre rozaba lo polar, nueva decepción; el "ambiente" (en este caso el que podíamos registrar por vía olfativa) no era el más deseable, las decepciones iban superando a las alegrías...

Presentación de los equipos, aplausos de cortesía para dos rivales ex-verderones: Ausina y Goyo Domínguez (como les gusta hacernos sufrir después, ¡es su "trabajo"!). El partido comienza como el ambiente, frío, aunque los visitantes manejan las primeras ventajas, no consiguen despegarse en el marcador y el primer cuarto se cierra con un 8-13 para Basquet Pla.

En el segundo parcial más de lo mismo, ambos equipos continuaban acumulando fallos en los lanzamientos y el ambiente frío en la grada solo aumentaba tímidamente de temperatura cuando se producía alguna decisión arbitral cuestionable (es triste, pero situaciones similares en el juego siempre tienen distintas respuestas arbitrales y, una y otra vez, nos sentimos perjudicados, algo huele mal en el Carlos Sastre -y no todo parece proceder de los desagües-). El caso es que llegó el descanso y el luminoso registraba un resultado igualado: 23-25.

Y comenzó el tercer cuarto, y Óbila, con Tury y Ballesta en cancha, disfrutó de sus mejores momentos de juego y consiguió alcanzar la máxima ventaja en el marcador (41-29), pero fue un espejismo, todo volvió a cambiar, los jugadores perdieron la concentración y en la grada los aficionados nos centramos en criticar a los árbitros y el "run-run" aumentaba al ver que Johnson no había vuelto a participar desde el final del cuarto anterior (¿castigo? ¿enfado?... nadie lo entendía). Con todo ello se alcanzaba el final del parcial con un resultado de 41-41, el último cuarto dictaría sentencia.

En el último cuarto continuó primando el fallo sobre el acierto, así fue en uno y otro equipo y, como no, en la pareja arbitral que ya había conseguido desquiciar a casi todos los presentes. Llegan los instantes finales con un resultado de 60-60. Óbila jugará el balón con la intención de agotar la posesión y, si es posible, conseguir anotar dejando poco más de un segundo para la reacción de sus rivales. A algunos aficionados, aquellos que habían conseguido abstraer su sentido olfativo del "ambiente" reinante en el pabellón, les olía a prórroga. Ojalá hubiese sido así, la precipitación condujo a una pérdida de balón que fue aprovechada por Basquet Pla y que no pudo ser subsanada en el segundo y tres décimas que tuvimos para intentarlo. Al final...

Óbila C.B.  60  -  Basquet Pla  62

... un resultado que nos deja fríos, muy fríos. El inicio de la segunda vuelta no está siendo del agrado de la Marea Verde, dos derrotas en dos encuentros, un 8-8 en la clasificación que nos deja en el límite del play-off. Estamos convencidos de que nuestros jugadores dan todo lo que tienen en cada partido, y ellos pueden estar seguros de que los aficionados buscaremos fuerza extra para seguir animando...

¡¡¡ Vamos Óbila !!!