sábado, 10 de octubre de 2015

¡A tabla también vale!

Esta manida expresión del argot del basket que tantas veces hemos utilizado para reivindicar la validez de la poco agraciada visualmente canasta a tablero, podría aplicarse perfectamente para definir el partido de hoy. Seguramente hayamos presenciado el encuentro menos vistoso de los últimos tiempos en el C.U.M., pero la victoria final en este tipo de encuentros, no sin tomarnos nuestra habitual dosis de sufrimiento, tiene el mismo valor que la obtenida en el "encuentro del siglo".

Volvía la LEB Plata al Carlos Sastre y el conjunto visitante, Marín, prometía presentar batalla. Todos esperábamos un buen espectáculo. La Marea Verde iba poblando las gradas y los aficionados gallegos, en menor número que en otras ocasiones pero igual de animosos que siempre, tomaban posiciones en el pabellón. Realizadas las presentaciones, no sin dificultad por una afección propia de estas fechas en la garganta de nuestro speaker, descubríamos que Carlos Toledo no participaría en el juego al no estar recuperado totalmente de la intervención que le había sido practicada en su muela del juicio.

Comenzó el partido y, desde el principio, se pudo comprobar que la vistosidad no iba a ser una de sus cualidades. Transcurridos los primeros tres minutos y medio, Óbila no había conseguido anotar todavía. El 0-5 que mostraba el luminoso y las continuas interrupciones en el juego, cuatro faltas ya para cada equipo, evitaban que los aficionados entraran en el partido a pesar de los intentos de Óbilon, cencerro en mano, de calentar el ambiente. No conseguían los verderones despegarse de la presión a la que les sometían los jugadores gallegos que, a su vez, no eran capaces de sacar mucho rendimiento a sus situaciones de ataque. Un triple de Oubiña en los instantes finales del primer cuarto servía para cerrar el parcial con una buena ventaja para Marín: 7-14.

No mejoró mucho el juego en el segundo cuarto. Los locales, apresurados por intentar agradar a la afición, cometían algunos errores de precipitación que permitieron al conjunto visitante alcanzar la máxima ventaja cuando se llevaba disputado un tercio del periodo (11-19) aunque también consiguieron despertar a la Marea Verde que ya no dejaría de animar durante todo el encuentro. Young y Marzo, con un par de triples, metían a Óbila en el partido (19-20 a 5:17 para el descanso). Los compases finales de este cuarto, trabados como lo estaba siendo todo el periodo desde su inicio, desembocaron en un corto resultado (26-26) con el que los equipos se retiraban a los vestuarios.

Tras la reanudación no se apreciaban signos de mejora en la calidad del juego, a pesar de ello, los jugadores locales, apoyados en un buen, aunque poco vistoso, trabajo, conseguían despegarse poco a poco en el marcador (Young, Sebirumbi, Mbamalu, Nikolic...) 43-33 a falta de tres minutos. Tres minutos en los que, de nuevo, ambos equipos se volvieron a enredar en una sucesión de fallos, pérdidas y faltas con las que se llegaba al final del periodo con un resultado de 49-39.

Comenzó en cuarto final y la tónica del encuentro seguía repitiéndose: juego bronco y deslucido, errores, trabajo "sucio" en el que la única recompensa que encontrábamos los aficionados era la de ver que el tiempo pasaba y Óbila mantenía la ventaja (56-46 a 4:39). Pero pasó "lo que tenía que pasar", dejémoslo en que Marín, herido, supo apretar más de lo que lo había hecho durante el resto del partido y olvidémonos de cualquier otra circunstancia (ya habrá temporada para hablar de ellas, aunque no quisiéramos). Los visitantes apretaron el partido y se colocaron a dos puntos (62-60) cuando faltaban 26 segundos para la bocina. Balón a Lobo y personal de Marín. Álvaro que no falla y pone el 64-60 cuando restaban 16 segundos, resultado que parece definitivo. La Marea Verde que sigue empujando, Rogers que pone emoción (64-62) y una "extraña" pérdida de balón que permite a Marín seguir soñando. Finalmente, con toda la grada empujando, se consigue cerrar esta sufrida e importante victoria...

Óbila 64 - Marín 62

Lobo y Marzo 14 puntos, Nikolic 12, Mbamalu 9, Sebirumbi y Young 6... todos sumando, Ramasauskas que dispuso de sus primeros minutos y la afición que volvió a apoyar al máximo para conseguir esta segunda victoria. ¡¡¡Vamos EQUIPO!!! dos de dos


¡¡¡ Vamos ÓBILA !!!


5 comentarios:

  1. Mal partido por parte de los árbitros. Al Obila todavía le falta arrancar también faltan muchos entrenamientos. Y Ramasauskas también tiene que acoplarse. No sé qué opinará el resto

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  2. Mal partido, afición sosa, exceso de "invitados", el de la papeleta del jamón ya cansa, lo mejor el resultado y la capacidad de sacrificio del equipo. Hay cosas que han mejorado pero queda mucho por hacer.

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    1. Ya sabemos como es la afición les cuesta arrancar. Y lo de la papeleta si no toca es mala suerte solo eso

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  3. No hay que andarse por las ramas, el partido malísimo pero el arbitraje todavía peor, la afición, como buenos abulenses que somos, tardará en entrar en calor pero no fallará. El análisis del partido impecable, estas victorias son tan feas como importantes ¡vamos Óbila!

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  4. Si señor, a tabla también vale y esta victoria puede ser muy importante

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